miércoles, 13 de marzo de 2024

Impresiones alemanas: judíos (2)

Dessau, la pequeña ciudad de Alemania oriental ubicada en lo que fue de 1949 a 1990 la DDR comunista, tiene una historia judía. Ahora no quedan prácticamente judíos allí, aunque hay una pequeña comunidad compuesta por los que se conocieron a finales del siglo XIX y principios del XX como Ostjuden (judíos del este) que llegaron desde la disuelta Unión Soviética. De ellos hablaré un poco más adelante. 

En Dessau nació el filósofo Moses Mendelssohn (1729-1786), propulsor de la Haskalá  (Iluminismo o Ilustración) que pretendía reconciliar el desarrollo cultural y filosófico de la naciente modernidad con la tradición judía. Para algunos, Mendelssohn sería el padre del “asimilacionismo” (él mismo respetaba la Torá) que después tendría consecuencias terribles para los judíos alemanes que, extremadamente confiados de su “alemanidad”, no pudieron escapar del genocidio perpetrado por las nazis.  Mendelssohn, se argumenta también, es de alguna manera un precursor del sionismo, en la medida en que proponía una participación política de los judíos, lo que inspiró a Herzl y otros asimilados como él a elaborar una ideología nacionalista para lograr la autodeterminación judía. Hoy hay un busto de Mendelssohn en un parque de Dessau (ver foto). 

Busto de Mendelssohn en el Stadtpark en Dessau.

En el siglo XVIII Dessau dio muestras de apertura hacia los judíos. Cuando el Príncipe Leopoldo III Federico Franz de Anhalt-Dessau (1740-1817) mandó a erigir los hermosos jardines de Wörlitz (ver fotos) al estilo inglés, ordenó que se construyera una sinagoga (inaugurada en el emblemático año de 1789) con su respectivo mikvé (baño ritual). El edificio circular de la sinagoga y el mikvé siguen en pie (ver fotos), porque un cuidador del parque evitó que los nazis lo destruyeran en tiempos del Tercer Reich.

El Wörlitz Park, con sus jardines al estilo inglés.



La sinagoga inaugurada en 1789 en el Wörlitz Park.

La pequeña puerta que conduce al mikvé (baño ritual)

Hoy en día, Dessau trata de reconciliarse con su pasado judío. En 2023 se inauguró la Neue Synagoge (la Nueva Sinagoga o Sinagoga Weill). Para su construcción contribuyeron las iglesias católicas y protestantes de la ciudad, el gobierno federal alemán, el gobierno municipal y otras organizaciones judías y no judías de Alemania (ver vídeo y foto). Asistí al servicio de Kabalat Shabat el viernes por la tarde, dirigido por un hazán (oficiante o kantor en alemán) que explicó la parashá (porción de la Torá) de la semana a los congregantes en ruso. Los asistentes al servicio de bienvenida del Shabat eran en su totalidad de la antigua Unión Soviética, la mayoría rusos y algunos ucranianos. El pequeño grupo de congregantes estaba compuesto por hombres y mujeres de una cierta edad. No vi a ningún niño o joven entre los participantes. Fueron muy amables conmigo, y se interesaron en saber de dónde venía y qué hacía en Dessau.


La Neue Synagoge en Dessau.


Un panel cerca de la Nueva Sinagoga
cuenta la historia de la casa del hazán,
ubicada en el barrio judío de Dessau.

Monumento en memoria de los judíos asesinados
por los nazis cerca de la sinagoga.

Desde 2015 se celebra en Dessau el Kurt Weill Fest. Kurt Weill fue un compositor judeo-alemán que creció en el barrio judío de la ciudad que era conocido como Sandvorstadt. Su padre, Albert Weill, era el hazán (kantor) de la sinagoga local. Weill emigró ante la llegada al poder de los nazis en 1933, primero a Francia y luego a Estados Unidos. Su composición más conocida, escrita en colaboración con Bertolt Brecht, es la Ópera de tres centavos. 

En el festival de este año el programa incluyó el poema para violín y orquesta Yizkor (Memorial) del compositor judeo-alemán Paul Ben-Haim (originalmente Frankenburger), quien emigró a la Tierra de Israel (entonces Palestina bajo mandato británico) en 1933. La composición de 1942 comunica un lamento casi profético ante el exterminio de los judíos en Europa que entonces no era conocido por el mundo y que no había alcanzado los niveles de horror que después alcanzaría. La interpretación estuvo a cargo de la violinista Liv Migdal (nieta de dos sobrevivientes de la Shoá) con la orquesta de Dessau.

El programa del Kurt Weill Fest de 2024.
Dice: "Brillar en la sombra"

La cuerda en casa del ahorcado

En Alemania está prohibido por la constitución usar los símbolos nazis, hacer la apología del nazismo o negar el Holocausto. Pero hay quien encuentra la forma de darle vuelta a la prohibición. Así lo hicieron activistas pro-Palestina en plena Alexanderplatz, el punto más transitado de Berlín. Un sábado con gran flujo de circulación de personas, en medio de la plaza rodeada de centros comerciales (el más conocido es el inmenso Alexa), con banderas Palestinas ondeando, tenían varios carteles en el suelo. Uno de ellos decía lo siguiente (ver foto): “Adolf Hitler se inmortalizó como el más grande criminal de la historia. Nelson Mandela se hizo un nombre como uno de los grandes en la lucha contra el racismo. Y usted, Annalena Baerbock (nota: es la ministra de Relaciones Exteriores de Alemania), ¿cómo pasará su nombre a la historia?”. Otro cartel decía (ver foto): “Israel adelanta una guerra de hambre contra la población civil en Gaza”. Haga usted la ecuación mental: mencionar a Hitler en pleno corazón de Berlín, acusar a Israel de matar de hambre a los palestinos. Hay formas de nombrar la soga en casa del ahorcado y “pasar agachado”.

Propaganda pro-Palestina en pleno corazón de Berlín.



En Dessau vi pegantinas y grafitis contra Israel y a favor de los palestinos (ver fotos). Una decía: “Gaza. Feministas por Palestina”. Una pintada: “Resiste la ocupación sionista”.  




Una observación adicional. También en Dessau hay grafitis y calcomanías contra los nazis (ver fotos).

Dice: "Dessau libre de nazis"



Primera entrega => Impresiones alemanas: transición/cambio (1)      


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